¿SABÍAS QUE LAS ESPONJAS PARA LAVAR PLATOS SON UNA DE LAS MAYORES FUENTES DE BACTERIAS? ¡CONOCE CÓMO LIMPIARLAS Y DESINFECTARLAS!
Las Esponjas: el artículo más sucio del hogar. Para el doctor Philip Tierno, maestro clínico de Microbiología y Nosología en la Universidad de la ciudad de Nueva York, “la cosa más sucia que puede haber en una casa es una esponjilla para lavar platos, aun más que una tapa de inodoro o bien un cubo de basura”.
Este objeto está elaborado con unas pequeñas aberturas de absorción que son las que facilitan la supresión de restos, mas asimismo las que preservan todas y cada una esas cosas sucias y microorganismos que se filtran en el proceso de limpieza.
Los restos de comida que se unen a la esponja pueden continuar por cierto tiempo cuando esta no se desinficiona y por cada veinte minutos que continúe húmeda se desarrolla una nueva bacteria.
El empleo de jabón lavavajillas podría hacer meditar que la esponja continúa limpia y no hay peligro alguno al frotarla en los platos; sin embargo, esto no es suficiente, en tanto que el producto no consigue suprimir por completo los patógenos que se hallan en el interior con los restos de comida.
La mejor forma de eludir intoxicación o bien enfermedades por culpa de una esponja llena de bacterias es a través de su desinfección.
Es paradójico tener que lavar un factor que se usa para la limpieza, mas la verdad es que es preciso y es la manera más eficiente de quitar los microorganismos. ¿De qué forma adecentar y desinficionar las bacterias? En una investigación efectuada por el Servicio de Investigaciones Agrícolas estadounidense (ARS, por sus iniciales en inglés) en el año dos mil siete, se efectuaron múltiples pruebas para determinar cuál era la manera más eficiente de suprimir los patógenos que se amontonan en las esponjas.
La primera cosa que se hizo fue remojarlas a una temperatura entorno en una solución con carne picada, con la intención de favorecer la cantidad de microbios para más tarde hacer el análisis: Se sumergió a lo largo de tres minutos en una solución de diez por ciento de lejía. Luego, en jugo de limón a lo largo de un minuto.
También se introdujo en el microondas un minuto. Para finalizar, se lavó en un lavaplatos con ciclo de secado. Los resultados lanzaron que con lejía y jugo de limón consiguen reducir de un treinta y siete por ciento al ochenta y siete por ciento de las bacterias.
Calentarla en el microondas termina hasta con un noventa y nueve con nueve por ciento de los microorganismos, resultado afín al del lavaplatos. Por ende, el estudio concluyó que la forma más eficiente para quitar bacterias y mohos de este aparejo es calentándolo en un microondas o bien en el lavaplatos con un ciclo de secado.
Para su desinfección en el microondas se debe aclarar con agua limpia y poner a calentar a lo largo de 2 minutos en temperatura máxima. Aparte de esto, asimismo se pueden atender los próximos consejos: Limpiar la esponja tras cada lavado. Adoptar un sistema de rotación con 2 esponjas con la intención de usar siempre y en toda circunstancia una limpia, mientras que se lava la otra.
Revisar el aparejo y intentar retirarle todos y cada uno de los restos de comida que quedan tras lavar los platos. Después de usar la esponja ponerla a secar para eludir la humedad y el desarrollo de las bacterias.
Si los platos o bien aparejos están untados de algún género de grasa animal lo idóneo es limpiarlos primero con papel de cocina tirable en vez de retirar esos restos con la esponja.