El ombligo es la parte central de nuestro cuerpo. Aunque no se haya podido identificar mucho su función o para que sirve si podemos decir que este nos puede hablar acerca de la condición física o estado de salud de todo el cuerpo. En el día de hoy vamos a identificar los diferentes tipos de ombligo. Identifica cual es el que tienes y que dice sobre ti.
Cuando el ombligo es redondo y hundido.
Este tipo de ombligo es característico en personas con tendencia a la obesidad. O bien aquellos que sin tener sobrepeso tienden a acumular grasa en la zona del estómago. Además de eso puede decir que sufres algún trastorno digestivo y que eres muy vulnerable para sufrir estrés. En caso de una persona muy delgada con este tipo de ombligo puede deberse aun inflamación o problema intestinal.
Ombligo con protuberancia hacia afuera.
Este es común de ver en algunos niños y en mujeres embarazadas. Se trata de una pequeña protuberancia en el centro del ombligo que puede indicar que la persona que lo tiene es propensa a sufrir de hernias aunque estas sean benignas. También puede ser que la protuberancia propia se trate de un quiste y puede ser retirado con una pequeña cirugía. Además se dice que las personas con este tipo enferman mucho de gripe.
Ombligo que muestra una U
Una forma armoniosa y da un aspecto muy característico (aunque podría indicar que la cicatriz del cordón umbilical no se cerró de la manera habitual), La mala noticia es que ese tipo no dice nada bueno. Estos ombligos podrían indicar problemas de piel o de riñón, además de problemas digestivos.
Cuando el ombligo dibuja un T
Dolor muscular y sufrir fuertes dolores de cabeza son las características del tipo de dolencia que presentan las personas con este tipo de ombligo. Podría indicar también que estas personas podrían estar faltas de energía por lo que se aconseja tomar vitamina del tipo B y hacer ejercicios regularmente.
Ombligo que tiene forma de una almendra.
Este tipo de ombligo tiene una pequeña protuberancia, permite ver el fondo, pero no llega a salir como sucede con otro tipo de ombligos. Estas personas serían propensas a tener dolores musculares, dolores de cabeza y tendrían que echar un ojo a su estructura ósea.
Muchas personas que no se sienten a gusto con su ombligo están recurriendo a practicarse una cirugía para cambiar la forma. Esto en nada cambia un padecimiento relacionado con esto. Solo lo hacen por cuestiones estéticas. Lo que si podemos hacer si queremos mejorar nuestra salud es tener una alimentación sana, tomar agua y hacer ejercicios regularamente.